jueves, 23 de abril de 2015

Señales (2002)



En ocasiones veo OVNIS:

Mezclar extraterrestres y suspense en el cine es un sendero peligroso donde el artífice de tal obra puede darse una torta de proporciones bíblicas. Por tal razón, el cine (o los productores) suelen escoger ramas de lo paranormal más atractivas para el público como pueden ser las posesiones (Líbranos del Mal, 2014), los poltergeists (Expediente Warren, 2013), los fantasmas (The Babadook, 2014), etc. Y todo esto en detrimento del clásico extraterrestre cabezón, con ojos grandes y de largas extremidades superiores que a la primera de cambio necesita abducir para sodomizarte con su material quirúrgico. Antiguamente este subgénero, sobretodo en la década de los 50, vivió un auge masivo gracias a la propaganda política que se insinuaba en este tipo de películas. ¿OVNIS y política? Sí, amigos/as. La figura OVNI era un eufemismo de una hipotética invasión soviética. Vamos… que los comunistas eran extraterrestres hostiles que querían destruir el capitalismo. Actualmente, con todo este tema más calmado, la clásica salida para este tipo de subgénero es armar a los ET’s con bazocas de Napalm y enviarlos a matar marines.


Aún así como fan de este tipo de temática deseo recomendar unas joyitas contemporáneas y que la multitud suele apartar, (no podemos vivir siempre de Encuentros en la tercera fase, 1977). La primera sugerencia sería Los Elegidos (2013), otra recomendación sería el relato corto sobre extraterrestres de la formidable V/H/S 2 (2013) y por último el fantástico bulo de La Cuarta Fase (2009). Eso sí, hay que tener cierto aprecio por la temática, no ser muy escéptico y poseer una imaginación envidiable sino el “Qué es esta mierda” puede planear con suma facilidad. A mí me encantaron.


Película:

Señales (2002) no es pirotecnia, no hay rayos ni ciudades arrasadas sino que trata de una invasión alienígena hiperrealista y minimalista que se pasea entre la intriga, el humor y la ciencia ficción. Toda esta mezcla es orquestada magistralmente por uno de los directores con uno de los casos más insólitos de amor/odio del celuloide, M. Night Shyamalan. Siento decir que la M. es de Manoj, no de Michael como el del Coche Fantástico.

Señales fue la quinta película del director indio (para nosotros la tercera después del Sexto Sentido y El Protegido) y la segunda más taquillera del director con una recaudación de más de 400 millones detrás del Sexto Sentido (672 millones). Señales no lo tenía fácil para remontar una pobre taquilla conseguida por El Protegido (250 millones) pero Disney alegró la cara del director del Sexto Sentido cuando le obsequió con 5 millones de dólares sólo por el guión de Señales, convirtiéndose en aquel momento en el guionista mejor pagado de Hollywood. Por cierto, un guión escrito en cinco meses. En total Señales le reportó a Shyamalan unos 12,5 millones de dólares que es lo equivalente a lo que tengo yo en casa debajo de una baldosa. Antes de aceptar el cheque, Shyamalan se dio el lujo de rechazar la escritura de Indiana Jones IV y de dirigir la tercera de las tropecientas de la saga Harry Potter por no sentirse preparado.


Quizá el problema de la taquilla de El Protegido fue que el público no la entendió como una película de súper héroes y la percibió demasiado oscura y fría; aspecto que cambiaría drásticamente con Señales muchísimo más comercial. Aún así Señales podría haber sido la sentencia de muerte de su director y ser marginado por Hollywood al selecto grupo de “directores de una sola película” pero con Señales todos salieron contentos.
Si algo domina con ahínco Shyamalan es la creación de atmósferas absorbentes y transformar la fantasía en terrenal y ciertamente la trama de Señales es realmente simple pero el director de El Protegido sabe trasladar la capacidad de empatía del personaje de ficción en el espectador. Shyamalan sabe inocularte en el cerebelo la pregunta de “qué harías tú si vinieran a tu casa unos alienígenas” y si debes actuar de la misma forma como cuando te encuentras a unos testigos de Jehová en el rellano de tu casa para obsequiarte con un folleto de personas tullidas. Esta casuística puede ser atrevida pero la sensación alienígena es similar.


Shyamalan juega mucho con esa emoción, no mostrándonos lo evidente (el extraterrestre) (el testigo de Jehová en el rellano) pero sí nos revela con pequeños detalles de que están más cerca de lo que pensamos, como con un simple movimiento de un columpio o una sombra detrás de una puerta.

Obviamente el título de Señales proviene de los círculos hechos por los ET’s en los cultivos, sin embargo este título también representa la búsqueda de señales por parte del personaje de Mel Gibson, el padre Graham, ya que pierde su fe cuando su mujer fallece de la manera más cruel posible en un atropello. Como curiosidad, el primer día de rodaje del film fue programado para dos días después del 11S, con la casualidad que la primera escena a rodar era aquella en la que el padre Graham mantiene una última conversación con su mujer que permanece aún con un hálito de vida. Una última conversación que se podría asemejar a la situación vivida por aquellas víctimas del 11S que les dio tiempo a despedirse de sus familiares antes de fallecer. Ese día el ambiente en el rodaje estaba muy cargado y las lágrimas de Gibson y del resto del reparto no fueron las únicas del lugar. Antes de empezar a rodar el equipo realizó una vigilia alzando velas al cielo en homenaje a los fallecidos.


Shyamalan es un tipo que sabe rodar, largos planos para mostrar suspense, entornos opresores y siempre prima lo visual y se confirma el término “visual” ya que antes de empezar el film se pasa tres meses dibujando cada plano con el resto del equipo (storyboards). Técnica que no realizan muchos directores y que molesta a los productores porque dilata mucho los plazos. Además, Shyamalan suele rodar en orden del guión para no subir costes aunque justamente en Señales, la escena final en la que el personaje de Gibson inyecta la medicación a su hijo, la tuvieron que filmar a mitad del film. Más que nada porque si llevas todos los exteriores del film filmados a pleno sol y el final lo ruedas con una nieve apocalíptica, canta como una almeja. Además se supone que la historia transcurre en dos o tres días. Este aspecto hay directores que se lo pasan por el forro, es divertido.


Según su director, Señales sostiene influencias de tres películas tan eclécticas como los Pájaros (1963) de A. Hitchcock y La noche de los Muertos Vivientes (1968) donde coinciden en las ideas de una historia sobrenatural inexplicable y de una trama centrada dentro de una casa. Y también toma prestado las dosis de suspense de la viejuna Invasión de los ladrones de cuerpos (1956).

Señales posee escenas memorables que tocan diversos géneros como por ejemplo el humor; como cuando el abuelo de la tienda de libros no se cree la historia de los círculos porque aparecen demasiados anuncios de refrescos al dar la noticia. O el tema del papel de plata en la cabeza para evitar que los ET’s lean el pensamiento. También toca el drama; como la secuencia de la muerte de la mujer del padre Graham o el suspense; como cuando sólo se le ve la pierna al extraterrestre en el maizal. También destacar la espectacular escena del vídeo doméstico donde aparece un extraterrestre en un cumpleaños y que muchas webs de misterio intentaron colar como real (ja).



(Spoiler hard) Señales ofrece detalles interesantes en términos de guión, como por ejemplo cuando vemos que durante toda la película el personaje de la hija pequeña (Abigail Breslin) va dejando vasos de agua por toda la casa porque afirma que está contaminada y no la puede beber. Su comportamiento saca de quicio a la familia y da al espectador una sensación de que la niña está un poco perturbada a raíz de la muerte de su madre. Más tarde se descubre que los círculos en los cultivos están hechos lejos del agua, lo que enlaza la sospecha de que los extraterrestres puedan tener aversión a este elemento. Al final gracias a los vasos de agua olvidados por la niña permitirá a Merryl “batear fuerte” sobre los vasos y matar al extraterrestre invasor. El comportamiento del personaje de Abigail Breslin sobre el agua como su frase inicial en la película: “Hay un monstruo en la ventana de mi habitación. Me das un vaso de agua” nos ofrece pistas subliminales para solventar la escena final. Un detalle que recuerda, ahora que la tengo fresca, a la magnífica (pese a quién le pese) Interstellar (2014) donde la hija (Murph) del personaje de McConaughey la tachan de loca porque dice que ve un fantasma al inicio del film y no cuento más. En términos de guión, hilar detalles iniciales con la conclusión del film con cierta gracia, tiene su aquel.


Crop Circles

Shyamalan parte de una historia real sobre aquel controvertido tema que fraude o no, existe; y no son más que aquellos famosos círculos perpetrados en latifundios agrarios que dada su gran extensión sólo pueden ser vistos desde el cielo. El director indio pidió expresamente para la película que realizaran estos dibujos de 300 o 400 metros en campos de maíz y no quiso CGI (efectos especiales). Es más, el maíz de la peli se plantó a propósito y se hizo regar con un pionero sistema de regadío que sorprendió hasta a la universidad agrícola de la zona, Delaware Valley College. Todo este hito fue gracias al diseñador de producción Larry Fulton que también le tocó hacer las circunferencias en los maizales usando el mismo sistema que unos jubilados ingleses que timaron a medio mundo con este tema.


Aún así según la cultura no escéptica y rasgo que utiliza como idea principal nuestro amado Shyamalan; estos dibujos en los cultivos representan balizas o señales para futuros aterrizajes extraterrestres. Todo este fenómeno empezó a mediados de los 70 en Inglaterra con unos sencillos círculos de 10 metros. Más tarde se empezaron a crear figuras más complejas y de más longitud, dando una alegría al pobre campesino que por la gamberrada ya no podría conrear más en esa zona. Aún así, al no saberse quién es el responsable de los miles de círculos que hay ejecutados por el mundo, ya que muchos de ellos son inexplicables, podríamos estar hablando de aburrimiento de granjeros, hongos, la misma meteorología o de hasta de una respuesta extraterrestre a un experimento de Carl Sagan en el 1974. La verdad que si tuviéramos que sentir pavor deberíamos tenerlo con las líneas de Nazca del Perú ya que fueron hechas por una cultura de 700 años a. c y ya dibujaban astronautas. Eso sí que da respeto.  



Ficha técnica:



Para el papel de Mel Gibson (Graham) se barajó un actor más mayor como Paul Newman o Clint Eastwood pero ambos pasaron del tema. Entonces Shyamalan pensó en Johnny Depp con quien tuvo contacto pero no llegaron a un acuerdo y entonces el papel recayó en el protagonista de Mad Max.
El papel de Merril, interpretado por Joaquin Phoenix iba destinado para el actor de Hulk, Mark Ruffalo pero una otitis hizo que abandonara el proyecto. A partir de Señales Joaquin Phoenix se hizo muy amigo de Shyamalan y lo veríamos también el Bosque (2004). Para el rol de hijo mayor de la familia recayó en el hermano de Macaulay Culkin, Rory Culkin pero el papelón más destacable fue para la actriz Abigail Breslin, donde Señales fue su debut y es vista en Pequeña Miss Sunshine (2006) y en la tremenda La Última Llamada (2013).
También fue curioso que aparte del trauma del 11S por aquellas fechas se fraguaba una huelga de actores, lo que hizo que Shyamalan contara, ya que no tenían más compromisos, con el mismo equipo técnico que trabajó para el Sexto Sentido. Menos en el montaje que cambiaba de montador por tercera vez y el montaje de Señales recayó en una tal Barbara Tulliver.



Declaraba Phoenix que reinaba muy buen ambiente, llegando a formarse una verdadera familia. Se ve que Rory Culkin imitaba muy bien a James Brown partiéndose el personal y la chiquitina Abigail Breslin jugaba con Phoenix a pulsos de dedos. Para Mel Gibson fue una lección de interpretación y un ejemplo de cómo se tienen que hacer las cosas. 
Por último, la música de James Newton Howard, habitual del director indio y que gracias a los intensos storyboards del director del Incidente, pudo componer la BSO de la película sin necesidad de que se empezara a filmar. Una banda sonora potente que con sólo tres notas compone una melodía muy “alienígena”.



Curiosidades:

Mel Gibson no sabía que el actor que interpretaría al culpable de la muerte de su mujer sería interpretado por Shyamalan. Por eso fue una sorpresa cuando se lo encontró en la escena del coche.


El extraterrestre fue diseñado por Industrial Light and Magic, la compañía fundada por el señor George Lucas. Lo gracioso es que en los extras, esta empresa afirmaba que los movimientos del extraterrestre final los crearon como si se tratara de un yonki que entra en tu casa (¿).

Para diseñar al ET usaron modelos femeninas pero descartaron la idea al ser sus movimientos poco amenazantes.

Los dibujos animados que ve la niña por la TV pertenecen a la serie El Laboratorio de Dexter.


Shyamalan no quería que en la portada sólo apareciera Mel Gibson ya que consideraba que el protagonismo era coral. Tampoco quiso que se promocionara el film como “del director del Sexto Sentido” porque consideraba que la película perdía valor.

Una de las habilidades de los ET’s era el camuflaje y en la escena final cuando la niña grita se puede observar como su rostro se graba en la espalda del alienígena por pocos segundos.



En la escena mítica de la grabación casera del extraterrestre, se supone que la secuencia proviene de Brasil. En la versión original el personaje de Joaquin Phoenix espeta un move children “vámonos” cuando se supone que la lengua oficial es el portugués; pero para más inri en la versión doblada al castellano el personaje suelta un “andiamo”. Hasta la próxima.

viernes, 10 de abril de 2015

Actrices que no deberían envejecer nunca (del 11 al 1)


Acabemos con esta pesadilla testosterónica y glorifiquemos a aquellas actrices que pasados los 45 años aún nos hacen estremecer desde el entrecejo hasta el perineo. Después de la trepidante lista del 23 al 11, donde agasajábamos aquellas señoras que fueron verdaderas diosas de nuestra juventud. Llegamos al Top eleven, quizás más mainstream que el anterior, pero no por eso menos excitante.


Empecemos Top 11.
  
11. Adrienne Barbeau (11 de junio de 1945). La más longeva de lista; y que por cómputo de edades podría ser mi abuela. Símbolo sexual de los 80 y ex mujer del director de La Cosa (1982), John Carpenter. La señora Barbeau fue un icono del género de la ciencia ficción y del terror y participó en películas como 1997: Rescate en NY (1981), La niebla (1980), La Cosa del Pantano (1982) o Creepshow (1982); y fue repescada para la serie Carnivale (2003) que duró injustamente dos telediarios. Mujer de imponente busto que aceptaríamos con ilusión que nos apretara las mejillas y que nos azotara en el trasero.




10. Alison Doody (11 de noviembre de 1966) fue aquella actriz que interpretó a la arqueóloga nazi Elsa Schneider en Indiana Jones y la última cruzada (1989). Doody, que nació en Irlanda, empezó como modelo y llegó a interpretar un pequeño papel en James Bond Panorama para matar (1985). Después de Indiana Jones cayó en el olvido hasta llegar el año 2004 donde compartió protagonismo con Patrick Swayze en el telefilm las minas del Rey Salomon, que en sí no era más que una copia descafeinada del personaje de Indiana Jones. En su momento, su rubia melena, sus ojos azules y sus escenas tórridas con el profesor Jones afloró en mi ser una tontería que aún no se ha querido disipar. No sé sabe el porqué la confundí muchos años con Diane Kruger que cuenta con 10 años menos que la intérprete de Indiana Jones





9. Jennifer Tilly (16 de septiembre del 1958). Actriz de amplio recorrido cinematográfico y nominada al Óscar como actriz de reparto en la película de Woody Allen, Balas sobre Broadway (1994). Nosotros la recordamos por ser la novia de Chucky en 1998 y por verla en vídeos nocturnos jugando al póker. Se ve que es una hacha en este juego de naipes y ha llegado a ganar premios de mucha pasta. Es curioso ver como siendo la única mujer de la mesa va desplumando a todo macho de la partida. En 2007 fue seleccionada entre las 50 actrices de Hollywood con mejor pechamen y es otra de aquellas actrices que forman parte del selecto club del formol donde su conservación es tal, que no me importaría ser su Muñeco diabólico en cualquier ámbito




8. Karen Allen (5 de octubre de 1951). Imposible no coger cariño a esta adorable actriz que ha participado en películas tan entrañables como Indiana Jones en busca del arca perdida (1981) y Los Fantasmas atacan al jefe (1988). También es vista en Starman (1984) de John Carpenter y fue recuperada en la última de Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal (2008), regalándonos a los fans uno de los pocos aciertos del film. Karen Allen evocaba en el sexo masculino la sensación de compromiso y de fidelidad. Su cara angelical no dejaba pensar en nada obsceno pero si en ponerle un piso.






7. Elisabeth Shue (6 de octubre de 1963). Recordada por su nominación al Óscar y por aquel sensacional baile donde derramaba whisky por todo su cuerpo en la película Leaving Las Vegas (1995). También es recordada por Karate Kid (1984) y por aquel cambiazo de actriz en las secuelas de Regreso al Futuro. Personalmente, en la película El Santo (1997) es donde avivó más mi ebullición mostrando una interpretación mezcla de inteligencia e ingenuidad. Uno no puede olvidar aquella escena en que el personaje de Val Kilmer en El Santo (1997) sufre una hipotermia. Entonces el personaje de Elisabeth Shue para solucionar tal agravio se despoja de sus ropajes y se restriega con el bueno de Val Kilmer para que éste entre en calor. Y a los demás que les den. Se dejó ver hace poco en la disparatada Piraña 3D (2010) donde sigue mostrando un físico y un talento envidiable.
 


6. Rebecca De Mornay (29 de agosto de 1959). Otra diosa de cara angelical que Antonio “Flags” Banderas definió como “peligrosa”, término que no hace más que crecer… la leyenda de esta guapa actriz. Banderas da fe de lo de peligrosa porque realizó un súper coito con De Mornay en la película Nunca hables con extraños (1995) y Antonio acabó más “pa” allá que “pa” aquí. De Mornay participó en Risky Bussiness (1983) y a raíz del film tuvo un romance con el suertudo Tom Cruise pero donde partió la pana fue en la recordada La mano que mece la cuna (1992). También es vista en Identidad (2003), los tres mosqueteros (1993), el abogado del diablo (1993), el tren del infierno (1985) entre otras. Su biografía está llena de fracasos amorosos y divorcios lo que nos lleva a la conclusión de que si tuviéramos un romance con ella nos despediríamos del llamado concepto “relación a largo plazo”.



5. Famke Janssen (5 de noviembre del 1964). Holandesa de 1,82 m, conocida por sus papeles en X-Men como Jean Grey y ser la mujer de Liam Neeson en la trilogía Venganza, entre otras. Sin embargo, donde uno ve todo su potencial es en The Faculty (1998) que interpretaba a una profesora mojigata que al ser su cuerpo poseído por un extraterrestre se desmelenaba y ponía en serios aprietos a Josh Hartnett. No me gustaría encontrármela con los mismos poderes telequinéticos que posee en X-Men; ya que si me leyera la mente no sería de su agrado (o sí).






4. Kim Basinger (8 de diciembre de 1953). Célebre deidad brutalmente muy bien conservada que permite ver como su cabello rubio no expone ninguna raíz. Sufrió pequeños brotes de agorafobia, es vegana y ganó un Óscar por LA Confidential (1997). Mantuvo un romance con el actor Alec Baldwin donde toda la información la podréis encontrar en el capítulo de Los Simpsons “Cuando criticas a una estrella”. Pongo la mano en el fuego y no ardo en pasión que es la figura femenina más imponente de toda la saga Batman. Por dios, ¿Maggie Gyllenhaal en el Caballero Oscuro? El Joker nos hizo un favor haciéndola estallar.






3. Elizabeth Hurley (10 de junio del 1965). Entramos en la posición de bronce. Esta británica se dio a conocer por su relación con Hugh Grant hasta que éste prefirió una mujer de pago para humillarse públicamente. Es curioso como Liz Hurley, diosa en nuestro coloquio, ha tenido pocas participaciones célebres en el celuloide y todas esas pocas interpretaciones han calado bien hondo entre nosotros, por ser fino. Es vista como acompañante de Austin Powers, también recordada en la comedia Al diablo con el diablo (2000) con Brendan Fraser y admirada en Colgado de Sara (2002) con Matthew Perry. Elizabeth Hurley es una de aquellas mujeres que serías capaz de vender a tu abuela aunque el premio sólo fuera que pudieras tocarla con un palo.




2. Halle Berry (14 de agosto de 1966). Poco hay que decir de esta diosa de ébano que merece la posición de plata. Oscarizada por Monster’s Ball (2001) donde filma un coito para enmarcar, poseedora de una de las mejores salidas de playa en el film de James Bond, Muere otro día (2002) e impresionante cuando la vemos encorsetada como Tormenta en la saga X-Men. Haciendo memoria también interpretó a la malota en la película de los Picapiedra (1994), que recuerdos… Halle Berry puede jactarse de quedar clasificada en las primeras posiciones de la mayoría de revistas masculinas o directamente en la primera posición, como sucedió en la revista People del 2003. A parte tiene pinta de tener mala gaita que en el ámbito que nos concierne siempre hay que verlo como una virtud.




1. Cassandra Peterson (17 de septiembre del 1951). Posición de oro. Han sido noches sin dormir, complejas estadísticas pero nadie merece este primer puesto más que ella. Se me puede acusar de enamorarme del personaje y es cierto; pero muy a mi pesar no conozco personalmente a ninguna de estas 23 mujeres que me han acompañado estos días.
Elvira, la Dama de la oscuridad, es un personaje extrovertido de piel nívea que nos ofrece un amalgama entre gótica y hembra del extrarradio que obviamente ha embelesado mi corazón. Ese carácter chulesco y sobrado, ese contoneo y esa sensación de poder hacerte un 8 en materia conyugal hace que lidere esta freak list con total impunidad. Actualmente parece que haya realizado un pacto con Nosferatu para que el paso del tiempo le sea esquivo. Imposible olvidar escenas del film donde vemos a nuestra ganadora como se le desliza un Hot Dog por la abertura de su busto o por ese hipnótico baile final sazonado con aquel movimiento rítmico que proferían las borlas de su sostén. Fantástica.













¿Qué musa del destape recomendáis?. Un abrazo.